08/08/09

Hay apelativos que culturalmente tienen un 'tufo a denigración'. Que molestan. Pasa con 'madre soltera'. En este caso el adjetivo nos dice que algo va mal. Va mal para la sociedad que concibe que las madres no pueden ser solteras, son términos contrapuestos. Pero no decimos "es una madre casada". Sino 'es una madre' con lo que suponemos que está casada y si no, ahí va el adjetivo. Nada añade el calificativo al sustantivo porque no se es peor madre por no estar acompañada legalmente por un hombre, ni todo lo contrario. Ambas, las casadas y solteras, son madres y punto. Ellas decidirán sus necesidades de compañía y de acompañamiento. La sociedad debe fijarse sólo en esta realidad para calificarlas. Debe fijarse en otras para acompañarlas.